“Inmaduras”, “irresponsables” y hasta “asesinas” son algunos de los epítetos que han debido soportar algunas mujeres que han decidido practicarse un aborto.
Lo cierto es que independiente de los motivos que hay detrás, no es una decisión fácil. Así lo pone de manifiesto una carta que comenzó a viralizarse a través de las redes sociales y que se titula “Abortaré el próximo viernes. Una carta abierta a la pequeña vida que nunca conoceré”.
En la misiva, cuya autora sólo se identificó como “H”, se expone el supuesto caso de una mujer pronta a abortar que se despide del feto que lleva en el vientre.
Tras el revuelo, el reconocido blog feminista estadounidense Jezebel recogió la carta, afirmando que “incluso cuando la decisión correcta, puede haber un montón de dolor involucrado”.
A continuación te presentamos el texto....
“Pequeña Cosita:
Puedo sentirte ahí. Tengo el doble de apetito y la mitad de la energía. Me rompe el corazón no sentir el encanto que debería sentir. Y me siento arrepentida y no arrepentida.
Lamento que este sea el adiós. Me entristece saber que nunca te conoceré. Podrías haber tenido los ojos de tu padre y mi nariz y podríamos haber inventado nuestras propias tradiciones, ser una familia.
Pero Pequeña Cosita, nos encontraremos de nuevo. Y prometo que la próxima vez que vea el signo azul (en el test de embarazo), la próxima vez estarás en la misma realidad y yo estaré lista para ti.
Pequeña Cosita, quiero que seas feliz. Más que las buenas cosas que quiero para mí misma, quiero las mejores cosas para el futuro. Porque esa es la razón por la que no puedo ser tu madre ahora. Todavía estoy creciendo. No sería justo traer una nueva vida en el mundo donde todavía soy atormentada por los fantasmas de las vidas que he experimentado.
Quiero que tengas las cosas que nunca tuve de niña. Quiero que seas mejor de lo que yo nunca fui y más magnífica de lo que yo nunca seré. No puedo hacerte lo mismo que me hicieron a mí: plantar una semilla hecha de amor y espontaneidad en un jardín y esperar que crezca sólo con sus sueños.
El amor y la espontaneidad son hermosos, pero tienen poco mérito. Y mientras estoy llena de sueños, estos no son una herramienta suficiente para construir un mejor mañana. No te puedo arrastrar a esto. No de esta forma.
Te amo, Pequeña Cosita y desearía que las circunstancias fueran diferentes. Prometo que nos veremos de nuevo y la próxima vez, podrás llamarme mamá
-H”.
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